04 de gener 2017

Nanomol Technologies, empresa surgida del ICMAB-CSIC: Pequeñas partículas para mejorar la medicina

Nanomol Technologies, una de las empresas de la delegación catalana que visitó Cuba el pasado mes de noviembre, aprovechó la estancia en La Habana para fortalecer su relación con BioCubaFarma, que agrupa empresas las empresas biotecnológicas y farmacéuticas de este país caribeño.para dar a conocer un nuevo ejemplo del trabajo que nace en la ciencia para llegar al mercado  Esta empresa surgida del Instituto de Ciencia Materiales de Barcelona (ICMAB-CSIC) anunció en Cuba que se ha iniciado el proceso de validación clínica de un nuevo fármaco desarrollado y patentado en colaboración con Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, integrado en BioCubaFarma, .
El nuevo medicamento está especialmente diseñado para mejorar la cicatrización de la úlcera de pie en personas diabéticas, y podría estar en el mercado en el plazo de cinco años. Este nuevo tratamiento es uno de los resultados destacados de una empresa catalana que tiene su base en la investigación científica.



La historia de Nanomol Technologies se remonta a finales de los años 1990 cuando el grupo de investigación Nanomol, del ICMAB-CSIC,instalado en el Parc de Recerca UAB, decidió incrementar los esfuerzos en la transferencia tecnológica de su amplia experiencia en la síntesis, procesamiento y estudio de los materiales moleculares y poliméricos con propiedades químicas, electrónicas, magnéticas y biomédicas.
El grupo de investigación Nanomol forma parte desde 2006 de la red TECNIO de ACCIÓ (la agencia para la competitividad de la empresa catalana, adscrita al Departamento de Empresa i Ocupació) y está activamente involucrado en la aplicación de la nanotecnología y las tecnologías sostenibles y económicamente eficientes para la preparación de materiales moleculares funcionales avanzados.
"La voluntad del grupo Nanomol de avanzar en la investigación aplicada coincidió con la iniciativa de la empresa Carburos Metálicos, que tenía una instalación en el ICMAB-CSIC, y que hizo una propuesta a los científicos para desarrollar tecnologías que hicieran servir gases, que es su campo de trabajo", recuerda Santi Sala, cofundador y actual gerente de Nanomol Technologies.
Los investigadores del grupo Nanomol Jaume Veciana y Nora Ventosa impulsaron entonces una línea de investigación que, en base a tecnología con gases, permite generar metodología para preparar materiales en forma de pequeñas partículas (nanopartículas), con aplicaciones como la mejora en la administración de medicamentos.
El gran potencial de este tipo de tecnologías facilitó diversas colaboraciones del grupo Nanomol con empresas farmacéuticas y biotecnológicas.
El paso definitivo llegó en 2010 con la creación de Nanomol Technologies, como spin off del ICMAB-CSIC, y con Jaume Veciana, Nora Ventosa y Santi Sala, entre otros, como socios fundadores. "Como ocurre en muchos otros casos, vimos que no es suficiente con generar un resultado de investigación y demostrar su interés para el sector industrial; hace falta asumir un riesgo y completar el proceso de transferencia de esta tecnología", explica Santi Sala.
La unidad de negocio más consolidada de esta spin-off del ICMAB-CSIC se centra ahora en el acompañamiento a empresas para llevar al mercado medicamentos basados en la tecnología desarrollada por el grupo Nanomol y transferida a Nanomol Technologies.  Así, esta empresa pretende añadir valor a moléculas bioactivas ya existentes o en de vías desarrollo de la industria farmacéutica y biotecnológica.  
Una segunda unidad de negocio se centra en servicios de consultoría a empresas farmacéuticas y servicios de análisis. "Nanomol Technologies está especializada en el diseño de partículas o nanopartículas y, por tanto, somos también expertos en su caracterización y podemos ofrecer este servicio a empresas", detalla Santi Sala.
En el caso del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, la colaboración con Nanomol se inició en 2010. Investigadores cubanos habían desarrollado un producto eficaz en la cicatrización de heridas en personas diabéticas pero el producto tenía que ser administrado con inyecciones en la zona afectada. "Los propios investigadores cubanos plantearon la posibilidad de formular la proteína de forma que pudiera ser administrada de forma tópica, como una pomada, sin perder su efectividad; reduciendo de esta forma las molestias a los pacientes", explica Santi Sala.
Nanomol consiguió en este caso, "una nanoformulación con la que se consigue integrar la proteína en una nanovesícula, de forma que se protege el principio activo de su degradación una vez que se aplica en la herida; y además se consigue que la proteína se libere de forma adecuada", detalla el gerente de la empresa catalana.      
Los resultados del trabajo han dado como resultado una patente y en la actualidad se está llevando a cabo el proceso de validación y escalado de producción farmacéutica para llevar el producto al mercado.

Proyecto con ayuda de La Marató de TV3

Una de las iniciativas en las que ha trabajado el grupo Nanomol, el proyecto NanoFabry, se encuentra en la lista de las investigaciones más destacadas que han recibido ayudas de la Fundación La Marató de TV3 en los últimos años. NanoFabry es una iniciativa que tiene como objetivo el desarrollo de nuevos fármacos para el tratamiento de enfermedades lisosomales, como la enfermedad de Fabry. Las enfermedades lisosomales generalmente son debidas a la deficiencia de una única  enzima en los pacientes que las sufren. Por ejemplo, la deficiencia de la enzima alfa-galactosidasa en el caso de los pacientes que sufren la enfermedad de Fabry. . La patente conseguida por ese proyecto ha sido licenciada a la empresa Biopraxis Research. "Nuestro producto consigue transportar la enzima de forma más eficiente hasta las células deficientes, según se ha demostrado en pruebas in vitro y también in vivo en animales", explica Santi Sala. Nanomol Technologies participa ahora en el proyecto europeo Smart4Fabry creado para completar todos los pasos necesarios para llevar este producto a las fases clínicas. En este proyecto del programa Horizon2020, que ha recibido una financiación de 5,6 millones de euros, participan 10 grupos de investigación y empresas, y está coordinado por Nora Ventosa del grupo Nanomol adscrito a CIBER-BBN (Centro de Investigación Biomédica en Red- Biomateriales, Bioingenieria y Nanomedicina).

Publicado 18 diciembre 2016 (texto ampliado). Página 'De la ciencia al mercado', suplemento Dinero, diario La Vanguardia